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Escalar la montaña corporativa como profesional de color es empinado, pero conquistable. Aprovecha tus puntos fuertes únicos, crea una red diversa y mantente arraigado a tu propósito. Tu cima está al alcance de la mano, y la vista merece la pena. #AscensoCorporativo #DiversidadEnLiderazgo
¿De qué trata?
"El camino hacia arriba (2022)" es una guía profesional que ofrece a los profesionales de color consejos para ascender en la empresa. Basándose en entrevistas y en la experiencia vivida, aborda temas como la ampliación de redes, la superación del síndrome del impostor y la obtención de mentores ejecutivos. Con sabiduría motivadora y estrategias prácticas, muestra cómo superar los retos del lugar de trabajo y desarrollar tu potencial de liderazgo.
Sobre el autor
El Dr. Errol L. Pierre es ejecutivo, estratega sanitario, profesor, orador público y autor. Actualmente enseña economía sanitaria en la Universidad de Columbia, la Universidad de Nueva York y el Baruch College, y forma parte del consejo de múltiples organizaciones sin ánimo de lucro.
Escalar con éxito la montaña corporativa.
La escalera corporativa suele verse como la ruta hacia el éxito. Pero para los profesionales de color, el camino hacia arriba implica algo más que subir el siguiente peldaño. Requiere tenacidad, comunidad y una perspectiva empoderada. Y a veces, implica moverse hacia los lados en lugar de hacia arriba.
El camino que tenemos por delante no es una escalera, es una montaña.
Alcanzar nuevas alturas exige resistencia cuando la pendiente se hace más pronunciada, y valor cuando el sendero parece desaparecer. Pero a pesar de las luchas, puedes conquistar los picos más altos. Sólo necesitas las habilidades adecuadas, un buen guía y la determinación para atravesar la maleza.
Ahí es donde entra este resumen. Aunque sus consejos son aplicables para tener éxito en los negocios en general, se centra en los retos únicos a los que puedes enfrentarte como persona de color, y comparte formas prácticas de sortear estos obstáculos para alcanzar la cima empresarial.
Saber dónde apuntar
Las historias que se cuentan a las personas de color sobre sí mismas suelen filtrarse a través de las personas que ostentan el poder. Esto puede hacerte creer que la montaña es demasiado difícil de escalar desde tu posición. Pero eso no podría estar más lejos de la realidad.
No dejes que otras personas te cuenten tu propia historia. Sé proactivo a la hora de aprender sobre tu historia cultural, y sobre los modelos que se pueden encontrar en ella.
¿Sabías, por ejemplo, que Los tres mosqueteros se basó en la vida de Thomas-Alexandre Dumas, un haitiano que escapó de la esclavitud para convertirse en un alto oficial militar en París? En aquella época, era el oficial de ascendencia africana de más alto rango que dirigía un ejército europeo. Y su historia inspiró a su hijo, Alexandre, para escribir la aventura mundialmente famosa que hoy conocemos.
Así que busca las historias que te inspiran. Cuando conoces a tus héroes, empiezas a reconocerte en ellos.
Además de aprender sobre tu historia, aprovecha lo que te impulsa personalmente. Es normal centrarse en la seguridad financiera ante la desigualdad económica: en EEUU, los ingresos netos medios de las familias blancas son casi diez veces superiores a los de sus homólogas negras. Pero a medida que avances, debes saber que el mejor salario no siempre es el mejor paso siguiente. Tienes que encontrar tu propósito.
¿Por qué te impulsa a liderar y tener éxito en los negocios? Identifica el impacto único que sólo tú puedes tener. Tu propósito puede impulsarte a superar casi todos los retos. Y descubriendo tu porqué desde el principio, podrás tomar decisiones que te guíen hacia tu versión del éxito. Tendrás una mejor perspectiva de las habilidades que necesitas adquirir, las experiencias que pueden ser valiosas y las personas que pueden ayudarte en el camino.
Establece objetivos ambiciosos alimentados por tu propósito superior. Si un camino está bloqueado, no pasa nada: es sólo una forma de subir la montaña. Conocer tu propósito significa que puedes dar marcha atrás, y aun así mantener la vista en la cima.
Apoyarse en la distinción
La diversidad empresarial debería consistir en hacer cambios positivos. Pero para las personas de color, puede parecer una trampa. Estás aquí para hacer algo significativo, no para sonreír en las fotos que hacen quedar bien a la empresa. ¿Cómo destacas? ¿Cómo encajas?
A veces puede ser difícil creer que perteneces al mundo empresarial, y mucho menos a la cima. ¿Te respetan tus compañeros de trabajo, o piensan que estás cumpliendo una cuota? ¿Cómo vas a ponerte al día cuando tus colegas parecen haber empezado con tanta ventaja?
El síndrome del impostor afecta desproporcionadamente a las mujeres y a la gente de color; las mujeres de color son las que peor lo pasan. Para muchas personas que no son blancas, existe una fuerte y a menudo válida preocupación de que se estén aprovechando de ti, o de que de alguna manera estés atrasado.
La realidad es que, si eres una profesional de color, probablemente hayas tenido que rendir excepcionalmente para llegar donde estás. La idea de que tienes que ser perfecto para merecer tu puesto es tan errónea como persistente. Tú perteneces. Y las cosas que te hacen diferente son las que te hacen tan poderoso.
Los retos a los que te has enfrentado pueden ser una fuente de fortaleza, y te dan una perspectiva única y valiosa. Los momentos que definen tu identidad, o MDI, son acontecimientos significativos que configuran tu percepción de ti mismo, tus creencias o tu lugar en el mundo. Cuando has experimentado el racismo, por ejemplo, cambia permanentemente tu visión del mundo.
Empieza por reconocer la adversidad. Reconoce y nombra la injusticia de la situación. Después, acepta la realidad de la experiencia. Acepta lo que ocurrió y cómo te afectó. Por último, asciende. Utiliza tus experiencias como oportunidades para adquirir sabiduría y fuerza. Deja que alimenten tu propósito, tu distinción y tu capacidad de liderazgo. Y lo que es más importante, no dejes que afecten a tu fe en ti mismo.
Lo que aprendes al enfrentarte a prejuicios y barreras sistémicas revela perspectivas que a menudo son invisibles para tus compañeros. Habla claro, comparte tu valor y forja tu propio camino informado por las cosas que has aprendido por el camino.
Networking y mentoría
Crear redes diversas y sólidas relaciones con mentores acelera el avance profesional de todos, pero es aún más importante para los profesionales de color. La educación y el trabajo duro pueden ser cruciales, pero establecer contactos es la clave para desbloquear oportunidades.
Sé deliberado a la hora de establecer contactos. A menudo gravitamos hacia las personas que tienen los mismos antecedentes culturales que nosotros. Por desgracia, para la mayoría de la gente de color, eso no incluye a los altos cargos. Conoce a los que toman las decisiones y deja que reconozcan tu talento: ellos son los que controlan los ascensos.
Eso no quiere decir que las relaciones entre compañeros no sean también importantes. Construye tu red lateral conociendo a gente de otros departamentos y equipos. Haz un esfuerzo consciente por ir más allá de tu función diaria. Nunca se sabe dónde pueden surgir oportunidades, así que echa una red amplia. Puede que haya un camino en la montaña de la empresa que nunca pensaste buscar.
Los mentores son profesionales más avanzados en su carrera, que pueden ofrecerte consejo y orientación sobre tu vida profesional. Busca mentores que se interesen activamente por tu éxito. Sé proactivo pidiéndoles su sabiduría y manteniéndoles al día de tus objetivos. Los mentores adecuados abogarán por ti y te abrirán puertas.
Aunque tu red debe ser diversa, es útil tener un mentor que comparta tu formación. Tener esa conexión cultural significa que están en una posición única para comprender los retos a los que te enfrentas como profesional de color. Y una vez que hayas adquirido experiencia, dásela a los nuevos mentores.
Todos sabemos que las reuniones cara a cara son cada vez menos frecuentes, sobre todo desde COVID-19. Pero si trabajas a distancia, enciende siempre la cámara en las videoconferencias. Es importante que los demás vean tu cara: les hace sentir que te conocen mejor. Aprovecha la comunicación directa siempre que puedas: envía un correo electrónico o un mensaje en Slack para presentarte si vais a trabajar juntos. Y siempre que sea posible, opta por conocer a la gente en persona.
Al ampliar tus conexiones, ganas visibilidad. La gente conocerá tus habilidades y podrá abogar por ti. Recuerda ser auténtico y ofrecer a cambio tus propias experiencias y conocimientos: el networking es una calle de doble sentido.
Racismo y discriminación en el trabajo
Enfrentarse a los prejuicios en el lugar de trabajo es chocante. Es probable que, como profesional de color, te enfrentes a la discriminación manifiesta y a microagresiones más sutiles. Ambas son agotadoras y potencialmente peligrosas.
Evalúa cuidadosamente los incidentes cuando se produzcan. No todas las ofensas requieren una respuesta inmediata. Si te sientes seguro, puedes hablar para establecer límites y educar. Pero debes saber que también está bien alejarse y reflexionar antes de reaccionar, sobre todo cuando las emociones están a flor de piel.
La discriminación en el trabajo es ilegal. Si hablas y el comportamiento continúa, es hora de elevar el incidente a la dirección o a RRHH. Estas personas deben exigir responsabilidades. Por desgracia, la realidad de la dinámica de poder en el lugar de trabajo puede ser más complicada, sobre todo cuando el racismo es sutil.
Tanto si prefieres abordar las microagresiones mediante un diálogo abierto como si utilizas procedimientos formales, haz lo que te parezca correcto, pero haz algo. Sea cual sea la vía que elijas, documéntalo todo. En los tribunales, la carga de la prueba de la discriminación recae sobre ti. Sólo alrededor del 1% de las demandas federales por discriminación las gana la persona que las presenta.
Registra cada incidente, incluyendo si lo has denunciado y a quién. Una buena forma de hacerlo es enviándote un correo electrónico a ti mismo. Los correos electrónicos llevan una marca de tiempo, y si utilizas el correo electrónico de una empresa, la organización archiva automáticamente estos datos. Estos registros son esenciales para demostrar un patrón de conducta.
En medio de todo, no olvides cuidar de ti mismo. Tu red y tus mentores deben estar ahí para cuidarte y abogar por ti. Busca asesoramiento si es necesario. No tienes que soportar la carga tú solo.
Aunque el racismo no desaparecerá de la noche a la mañana, hay formas de inspirar el cambio, como educar mediante la narración de historias para crear empatía. Tu presencia, tu voz y tu crecimiento son ya una poderosa declaración contra el racismo.
Por último, no tengas miedo de renunciar. Mucha gente te dirá que aguantes, por mal que vaya. Pero los entornos corporativos que no ven tu excelencia no la merecen. Si no puedes permitirte el lujo de renunciar de inmediato, empieza a buscar otros trabajos y haz lo que puedas para protegerte mientras tanto. No sacrifiques tu felicidad ni tu bienestar por una empresa que no te apoya.
Buscar nuevos horizontes
Habrá momentos en tu trayectoria profesional en los que te sientas preparado para buscar nuevas oportunidades. Esperemos que sea porque estás buscando un nuevo reto, no porque estés dejando atrás la discriminación. En cualquier caso, tienes que ser reflexivo a la hora de buscar trabajo mientras sigues empleado.
Ten claras tus razones para cambiar. Reflexiona sobre tu propósito, tus valores, tus habilidades y los objetivos que quieres alcanzar. Sé selectivo con las oportunidades que persigues, y asegúrate de que son las adecuadas para tu próximo paso.
Es una buena idea hacerse una idea de las nuevas oportunidades a través de tu red de contactos antes de solicitarlas activamente. Aprovecha esas conexiones para explorar empresas y funciones que se alineen con tu propósito, y ten cuidado de no poner en peligro tu trabajo actual.
Cuando empieces a presentar solicitudes, actualiza tu currículum y tus habilidades para las entrevistas, y pon al día tu perfil en Internet. Todo esto está relacionado con la elaboración de una narrativa que ayude a los posibles empleadores a entender cómo encajarías en el puesto. Prepara historias que destaquen tu impacto de liderazgo y las veces que has impulsado el cambio. Afina la narrativa de por qué este cambio hace avanzar tu trayectoria, y qué aportas.
Durante las entrevistas, haz hincapié en el valor que aportarás al puesto. Comparte tus perspectivas distintas y cómo eres capaz de resolver problemas. Si una empresa carece de diversidad, evalúa cuidadosamente la cultura. No ignores las banderas rojas ni comprometas tus necesidades. A veces, las banderas rojas no son visibles durante la fase de contratación, así que si puedes obtener otra perspectiva de la cultura a través de tu red de contactos, merece la pena profundizar un poco más.
Sobre todo, recuerda tu poder a la hora de elegir tu nuevo lugar de trabajo. Sé estratégico y aboga por ti mismo durante las negociaciones. Tanto las mujeres como las personas de color dicen sentirse incómodas negociando salarios, pero en el mundo empresarial se espera que haya negociación. Si no estás segura de lo que debes pedir, lo normal es ir entre un 10% y un 20% por encima de la oferta inicial.
Por último, cuando dejes una empresa, intenta no quemar puentes. Mantente en contacto con las personas que has conocido o de las que has aprendido. Nunca sabes dónde acabarán.
Con preparación, una red de contactos inteligente y conciencia de ti mismo, puedes hacer que tu transición a un nuevo puesto tenga poder e impacto. Confía en tu valía para encontrar un lugar de trabajo que aprecie todo lo que puedes aportar. El siguiente paso en tu carrera te está esperando.
Llegar a la cima
Llegar a un puesto ejecutivo como profesional de color es un logro monumental. Este logro conlleva la responsabilidad de elevar a los demás y dirigir tu organización hacia el éxito.
Parte de ser una persona de color en un puesto directivo es asegurarte de perfeccionar tu presencia ejecutiva. Esto implica habilidades como la comunicación, el pensamiento estratégico y la escucha activa. Independientemente de la autoridad que realmente tengas en tu puesto, los profesionales de color tienen que luchar más a menudo para que se reconozca esa autoridad.
Analicemos brevemente la teoría del cambio de código, que es cuando las personas cambian sus estilos de comunicación, comportamientos, apariencia o enfoques para alinearse con el entorno dominante.
El cambio de código permite a las personas de color cumplir las expectativas no escritas y minimizar los prejuicios en el trabajo. Pero también puede ser perjudicial. No suprimas tu identidad ni pierdas el sentido de ti mismo, sobre todo cuando alcances puntos más altos en tu carrera. Existe un equilibrio entre ser auténtico y adaptar estratégicamente aspectos de ti mismo que podrían desencadenar los prejuicios de los demás.
Como el cambio de código suele ser subconsciente, presta atención a cuándo cambias de código y elige cuidadosamente poner en primer plano partes de tu identidad. Los prejuicios inconscientes pueden hacer que tus compañeros respondan de forma diferente a un negro con traje que a uno con capucha.
Lo bueno es que una vez que ocupas un puesto de liderazgo, también estás en condiciones de influir en la cultura y los prejuicios sistémicos de una organización. Es hora de aportar las perspectivas únicas que has desarrollado, y abordar los puntos ciegos que tus colegas puedan haber pasado por alto.
Intenta promulgar políticas inclusivas y prácticas de talento. Amplía los canales de reclutamiento, exige listas diversas para la contratación e implanta encuestas de pertenencia. El objetivo es hacer de la diversidad, la equidad y la inclusión el núcleo de la cultura de tu empresa.
Tómate en serio tus responsabilidades financieras, pero considera siempre la ética y el impacto de tus acciones. Cuando estás en una posición de poder, eres responsable del sustento de las personas, de su desarrollo y de su sentido del propósito. Sé compasivo y ten en cuenta a todas las partes interesadas en tu toma de decisiones. Hacer lo correcto, en última instancia, impulsa el rendimiento.
Desde arriba, la oportunidad de catalizar un cambio positivo es monumental. Ejerce tu poder y tu plataforma con responsabilidad. Eleva a otros a través de las puertas que abras. Tienes la oportunidad de estar entre los modelos de conducta que te inspiraron en primer lugar.
Conclusiones
El viaje hacia arriba como profesional de color es un trabajo duro, y requiere que mantengas la fe en ti mismo. Así que confía en tus capacidades. Cada paso que das fortalece los que tienes por delante y despeja el camino para los que vienen detrás. Mantente anclada en tu identidad y tus valores. Busca una red que te eleve y eleva a los demás cuando puedas. Enfréntate a los obstáculos con valor, propósito y cuidado.
Aunque la escalera corporativa nunca se construyó pensando en ti, tienes el poder de alcanzar el éxito en tus propios términos. Sigue subiendo y reclama tu sitio en la mesa. La vista en la cima es hermosa.